Esta antología, iniciativa de Jordi Duró, reúne los dibujos sin palabras de Cesc. Dibujos universalmente comprensibles, y que muestran su cara más directa y cercana, la que él prefería. Esta selección quiere reivindicar a este gran dibujante como alguien que retrató con ternura algo más allá de su época y país: la sencillez de la condición humana.
Este humorista gráfico admirado desde siempre por Jordi, se dedicó, como sus contemporáneos Sempé y Sternberg, a la anotación costumbrista. Como ellos, miró con ternura a los niños y a la gente de la calle, y, por otro lado, denunció los abusos de poder y la explotación por parte de las clases altas.
Jordi Duró, cerebro y ejecutor de este proyecto, se encargó de la selección de obras y la redacción de textos, así como de la dirección de arte del libro, maquetado en Duró. Todo ello gracias a la confianza de la editorial Astiberri, que vio la necesidad de reconocer la obra de este gran caricaturista.